Si algo ocurría en nuestras cabezas cuando hablábamos de NEMESEA, es que o teníamos idea qué esperar de éste disco y tampoco sabía a ciencia cierta qué dirección tomaría NEMESEA a nivel musical. Ahora que finalmente lo tenemos a la mano, sólo podemos decir: wow! La primera canción siempre suele ser la que nos da una probada de lo que viene en el resto del disco, y en éste caso nos deja deseando mucho más. Con un angustiante intro de batería, nos pone ansiosos por segundos antes de que nos estrelle encima un potente riff de guitarras acompañados por la tremenda voz de Sanne. «THE STORM» es una canción que no entra en un estilo determinado como tal, porque fusiona la estructura musical y los toques electrónicos de sus anteriores discos con un poderoso (y algo sucio) hardrock. Realmente podemos decir que innovaron su sonido y al mismo tiempo sentir lo cómodos que están siguiente este estilo. Esta canción me recuerda un poco a Garbage, pero más pesado en sonido. Además con un tremendo discurso feminista!

«KIDS WITH GUNS» aparenta ser una canción un poco más relajada cuando escuchas las primeras estrofas, pero se pone más pesada y pegadiza a medida que se acerca a los coros. Un recurso que me parece muy bien logrado: un coro de niños que acompañan a riffs pesados de guitarras y que antecede a las poderosas estrofas de Sanne. Otra vez, el hardrock está más que presente. Lo que me gusta mucho de esta canción es de hecho, que no sigue ningún tipo de reglas. Es bastante versátil, no sabes dónde te va a llevar.

Con sólo comenzar «WHITE FLAG» comprobamos una vez más que las guitarras son las protagonistas indiscutibles del disco. Es mucho más melódica en los coros que la anterior, y por momentos se siente como una especie de «himno». Una vez la escuchas, se entiende perfectamente por qué eligieron ésta canción como el título del disco. Aquí escuchamos a Nemesea cantarle al mundo entero un su nuevo sonido, una canción que vocalmente es impresionante.

Desde la partida de Manda, no habíamos escuchado de lo que era capaz la voz de Sanne. Aunque son de timbres similares, por fin palpamos una clara diferencia. Es versátil, poderosa y dulce. Casi siempre, es en las baladas cuando podemos prestar mucho más atención en la voz. Tal es el caso de “SARAH” que es la balada potente del disco, y de la magnífica y emotiva «LIONS». En ésta última escuchamos cómo suena realmente Sanne y como los suaves arreglos de su voz te produce un nudo en la garganta que se queda contigo por toda canción (y después también). «LET THIS BE ALL» es una canción que también te deja con la boca abierta. Piano, voz, y elementos atmosféricos. No necesitan nada más hacerte sentir que flotas en el aire. Muy etérea, muy sutil. No es una canción que esperas de ellos para nada, y me encanta.

«DON’T TELL ME YOUR NAME» & «RATATA» son un excelente resultado de combinar elementos electrónicos sutiles con otros que son más sucios, agresivos y pesados tanto en guitarras, como vocalmente. Ambas son canciones con muchísima actitud y las que nos permite ver la real evolución por la que NEMESEA ha atravesado. El disco también nos ofrece canciones más rápidas en tiempo y pesadas en sonidos, tales como «FOOLS GOLD» y «SAYONARA». Ambas nos recuerdan muchísimo a sus singles anteriores (de los primeros discos) pero mucho más evolucionados, y con un sonido más sólido y fresco. El highlight del disco aparece con «NOTHING LIKE ME», que no sólo es la canción más rápida hasta ahora, si no que es la más versátil, dinámica, y los arreglos vocales son muy sorpresivos en el mejor de los sentidos. No es una canción que se pueda encasillar así no más. Por momentos se siente muchísimo el hardrock y la influencia punk es innegable. «HEAVYWEIGHT CHAMPION» es definitivamente una de las canciones más experimentales del disco, y de las que más disfruté. Muy atmosférica en un inicio, termina como una poderosa balada. Y ni qué hablar de la voz de Sonne. Todos queremos ver ésto en vivo. Como canción me atrevo a decir que está entre las mejores del álbum. «RISE» es otro ejemplo de la gran evolución de Nemesea, sobre todo en los coros y en el uso de sintetizadores. Sin dejar de mencionar el espectacular solo de guitarra que tiene. Ese solo se roba todo el crédito por sí solo. El disco cierra con «DANCE IN THE FIRE», una canción que hace que no te quedes quieto. Y no, no por los motivos que crees. Es como un jazz un poco más pesado. Hace que te muevas lentamente y sientas el ritmo. No se si es el mejor cierre para un disco como éste (o quizás no supieron dónde encajarla), pero definitivamente es una canción que tenía que estar.

Mi top 3 absoluto:

3. RISE

2. KIDS WITH GUNS

1. STORM